¡Hola, superestrellas! ¿Cómo estáis?
Anteriormente en el blog pudimos hablamos de la novela en la que se inspira la película de hoy (click aquí para ver la reseña), otra obra maestra. Pero lo que hoy nos concierne en gran medida es que al final, después de casi un año esperando, ha llegado de la mano de Netflix la película de La Mujer En La Ventana, protagonizada por Amy Adams y con un abanico alucinante de actores de los que hablaremos a continuación. Así que toma asiento y hablemos de la película.
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Comenzando por algo sencillo, podemos alegrarnos de que es una muy buena adaptación. Exceptuando quizá un par de escenas que les ha faltado por meter del libro, la adaptación es bastante fiel a este y además su montaje nos acerca más a las sensaciones que la protagonista nos definía a lo largo de las páginas.
Al contrario que pasó, por ejemplo, con La Chica Del Tren (click aquí para ver su reseña), donde se basó en Nueva York cuando en el libro tiene lugar en una ciudad londinense, aquí también volvemos a la Gran Manzana… con la diferencia de que sí sucede así en la novela. De hecho es en Harlem, justo donde parece verse la historia. Y aunque no tengamos muchos planos de la ciudad, las localizaciones en sí son todas perfectas. Aunque yo personalmente no me imaginaba la casa tan grande en el libro —por Dios Santo, si es que ahí se puede montar un Airbnb para doce—, es perfecta para jugar con el espacio y toda la sucesión de acontecimientos que transcurren en ella.
Pasando ahora a la colorimetría, qué podemos decir. Aquí es cuando comenzamos a notar ligeras influencias del cine de Alfred Hitchcock, con los colores intensos que contrastan entre sí y la paleta de colores que parece diseñada por Cinemascope. También es irónico (aunque seguramente hecho a posta) que la película en sí parezca que podría haberse hecho en los 50 —no solo por el obvio parecido a La Ventana Indiscreta—, cuando la protagonista se declara (tanto en la peli como en el libro) una obsesa del cine clásico.
Hablando de la película de Hitchcock a la que tanto se parece en cuanto a trama, no solo nos podría recordar al éxito de James Stewart y Grace Kelly, sino que los colores y efectos visuales de esta nueva adaptación nos podrían recordar a los utilizados en Vertigo, una película que cambió en muchos aspectos la visión que se tenía del cine. Las transiciones en color rojo, los efectos durante las «alucinaciones» de Anna, los paneos por toda la casa, los famosos planos holandeses… Es guiño tras guiño tras guiño.
Y finalmente, deberíamos hablar del elenco de esta película. Pasando un poco por alto a los personajes de Anthony Mackie y el hijo de Kurt Russell —ambos teniendo papeles más significativos juntos en Falcon & El Soldado de Invierno (click aquí para ver su reseña)—, centrémonos en los que se llevan el mérito de esta película: Amy Adams y Julianne Moore. Obviamente, el papel de Gary Oldman es perfectamente ejecutado, pero los dos personajes que logran ponerte los pelos de punta son los de estas dos grandes actrices, en especial Adams, quien nos deja sin aliento con su propuesta interpretativa de la agorafóbica Anna Fox.
La Mujer En La Ventana es todo un homenaje al cine de Hitchcock: desde los colores hasta la edición, esta película nos recuerda fuertemente a las películas de antaño que fueron construyendo poco a poco el éxito de Hollywood. De ahí que, juntando las interpretaciones, esta película se lleve un 4,5 sobre 5.
¡Y ya estaría! Espero que os haya gustado la reseña. Mientras tanto, podéis seguirme tanto en el blog como en mi canal de YouTube, TikTok e Instagram, donde subo semanalmente contenido que a lo mejor te guste.
Nos vemos pronto,
RP
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