¡Hola, superestrellas! ¿Cómo estáis?
Es un hecho que la plataforma Netflix, al igual que suelta de vez en cuando alguna joyita (como por ejemplo La Directora, de la que hemos hablado recientemente), también suele producir bastantes bazofias (otro ejemplo del que también he hablado en el blog es The Kissing Booth, aunque este se entiende porque cuenta con un público). Por lo tanto, hoy vamos a hablar de su última producción innecesaria y de los pros y contras de esta. ¿Preparadxs?
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La trama principal de la película parece una versión remodelada y teenager de Ghost: una chica muere por accidente y tiene que solucionar algunos problemas sin resolver con algunas de sus relaciones más cercanas. Así, para resumir un poco toda la narrativa, la historia trata de convertirse en una película chick-flick con drama gratuito por doquier. Y está hablándote una persona que ama las comedias y el género coming-of-age.
Entre el elenco destacan las dos protagonistas. Si hay algo que comparten las actrices Victoria Justice y Midori Francis, es que ambas han sido protagonistas de algún show o película juvenil (el último de Francis fue Dash & Lily, del que también tenemos reseña). Por lo tanto, son de las mejores opciones para interpretar a estos dos peculiares personajes. Por el lado contrario, habría que admitir que Justice está literalmente interpretando de nuevo el papel que la catapultó en su momento (Victorious)… No obstante, hay un punto en la película donde su personaje tiene un momento muy dramático y su actuación fue realmente buena.
En cuanto a los aspectos técnicos, poco hay que decir que destaque. Los efectos especiales están bastante conseguidos, aunque claro, se sienten algo «infantiles», incluso para una película juvenil. La paleta de colores va acorde con el que suele usarse en este tipo de comedias (especialmente de Netflix), aunque las escenas del principio con los neones y los diferentes planos de la fiesta fueron bastante notables. El guión es un poco flojo, con conversaciones cliché y momento innecesarios… pero al fin y al cabo, es una película entretenida.
El mensaje de la película puede ser bastante confuso, porque en un principio se da a entender que «si tienes un estilo de vida hedonista y fiestero, acabarás muertx». Sin embargo, conforme va transcurriendo la trama, te acabas dando cuenta de que es todo lo contrario, y aunque sea una moraleja ya bastante manida en este tipo de películas, recordar que debemos apreciar «lo que» tenemos y «a quiénes» tenemos en nuestras vidas.
Esta nueva pieza del catálogo de Netflix, aunque no sea una obra de arte ni tenga una estructura narrativa muy desarrollada, es fácil de ver y bastante entretenida, contando además con un mensaje esperanzador típico del género. Por lo tanto, se lleva un 2,7 sobre 5.
¡Y ya estaría! Espero que os haya gustado la reseña. Mientras tanto, podéis seguirme tanto en el blog como en mi canal de YouTube, TikTok e Instagram, donde subo semanalmente contenido que a lo mejor te guste.
Nos vemos pronto,
RP